CIENCIA Y TELEVISIÓN

 

En el panorama desolador de las tardes televisivas queremos destacar un par de programas que hacen la ciencia asequible y amena.

 

No nos referimos a los experimentos de acústica (identificar una voz cuando 10 hablan a la vez), ingeniería genética (quién es el padre de quién) o combinatoria matemática (¿cuántas parejas son posibles entre 8 personajes?),  habituales en las sobremesas.

 

Ahora que se acerca el mal tiempo y que parece ineludible pasar algunas tardes en casa, recomendamos dos programas que hacen de la ciencia un divertido pasatiempo.

 

Diariamente puede verse en La 2 Leonart. Es un programa cuyo objetivo es provocar en la audiencia infantil de 9-12 años el interés por el mundo científico a través de las manualidades. El programa consta de tres partes: en la primera se desarrolla una manualidad, se crea un objeto de índole científica. En la segunda se usa dicho objeto para desarrollar una pequeña trama de ficción científica. La tercera parte es una salida al mundo real donde, mediante un corto reportaje/entrevista, se verá la aplicación de la ciencia en la vida diaria.

Por otro lado, los domingo en cuatro el programa El Hormiguero cuenta con una sección denominada La Ciencia de Flipy. Su lema es que la ciencia, además de educativa, puede ser divertida. Su apuesta por la ciencia espectáculo ha permitido ver como se puede caminar por encima del agua trabajando con la densidad de los líquidos, una mano que introducida en un líquido no se moja o pelotas de playa levitando sobre el escenario.


Los profesores chiflados


© Juan José Moreno Navarro, 2006